sábado, 31 de octubre de 2015

Liturgia Mozárabe. Oración Postgloriam del Domingo XXX


Acepta propicio nuestras oraciones,
tú que te sientas a la derecha de Dios Padre todopoderoso;
y puesto que tú eres nuestro único defensor,
intercede por nosotros desde el cielo
al Padre bondadoso.
Amén.

viernes, 30 de octubre de 2015

Oh quién muriera por tu amor ardiendo


 ¡Oh quién muriera por tu amor, ardiendo
en vivas llamas, dulce Jesús mío,
y que las aumentara aquel rocío
que viene de los ojos procediendo!

   ¡Oh quien se hiciera un Etna despidiendo
vivas centellas deste centro frío,
o fuera de su sangre el hierro impío
de un africano bárbaro cubriendo!

   Este deseo, que a morir se atreve,
recibe Tú, pues la ocasión venida,
bien sabes que no fuera intento aleve

   ¿Y qué mucho que amor la muerte pida?
Pues no era muerte, sino puente breve
que me pasara a ti, mi eterna vida

Lope de Vega
Rimas Sacras. Soneto XL

jueves, 29 de octubre de 2015

Lectio divina. Nada podrá apartarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús, Señor nuestro.


Si Dios está con nosotros,
¿quién estará contra nosotros?
El que no perdonó a su propio Hijo,
sino que lo entregó por todos nosotros,
¿cómo no nos dará todo con él?

¿Quién acusará a los elegidos de Dios?
¿Dios, el que justifica?
¿Quién condenará?
¿Será acaso Cristo, que murió,
más aún, resucitó y está a la derecha de Dios,
y que intercede por nosotros?

¿Quién podrá apartarnos del amor de Cristo?:
¿la aflicción?, ¿la angustia?, ¿la persecución?,
¿el hambre?, ¿la desnudez?, ¿el peligro?, ¿la espada?,
como dice la Escritura:
«Por tu causa nos degüellan cada día,
nos tratan como a ovejas de matanza.»

Pero en todo esto vencemos fácilmente por aquel que nos ha amado.
Pues estoy convencido de que ni muerte, ni vida,
ni ángeles, ni principados, ni presente, ni futuro,
ni potencias, ni altura, ni profundidad, ni criatura alguna
podrá apartarnos del amor de Dios
manifestado en Cristo Jesús, Señor nuestro.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (8,31b-39)

miércoles, 28 de octubre de 2015

Demos gracias por los Apóstoles


Oremos para dar gracias al Señor, que por medio del testimonio de los apóstoles y de su vida generosamente puesta al servicio de Jesucristo, nos ha permitido después de tantos siglos llegar al conocimiento de la verdad, y a la esperanza de participar en la salvación. Démosle gracias al Espíritu Santo, que hizo de aquellos débiles hombres la semilla que llegó a fructificar en la Iglesia. Y le pedimos al Señor que nos conceda también, a cada uno de nosotros, el ser testigos de su resurrección en medio de las vicisitudes de nuestra vida.

A ti, Señor, te alabamos;
a ti, Señor, te reconocemos;
a ti te venera el coro de los Apóstoles.

martes, 27 de octubre de 2015

Por el difunto hermano Rupert


Ayer falleció en el Monasterio un monje verdaderamente ejemplar, el hermano Rupert. De profesión carpintero, era un monje amante de la oración, del trabajo, siempre dispuesto a ayudar en lo que fuera, y siempre con una sonrisa en el rostro y una palabra amable en los labios. Que el Señor le conceda el descanso eterno y el perdón de sus pecados.

Dale, Señor, el descanso eterno.
Y brille para él la luz perpetua.
Descanse en paz.
Amén.

lunes, 26 de octubre de 2015

Lectio divina. Somos hijos de Dios


Estamos en deuda,
pero no con la carne para vivir carnalmente.
Pues si vivís según la carne, vais a la muerte;
pero si con el Espíritu dais muerte a las obras del cuerpo, viviréis.
Los que se dejan llevar por el Espíritu de Dios,
ésos son hijos de Dios.
Habéis recibido, no un espíritu de esclavitud, para recaer en el temor,
sino un espíritu de hijos adoptivos,
que nos hace gritar: «¡Abba!» (Padre).
Ese Espíritu y nuestro espíritu dan un testimonio concorde:
que somos hijos de Dios;
y, si somos hijos, también herederos;
herederos de Dios y coherederos con Cristo,
ya que sufrimos con él para ser también con él glorificados.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (8,12-17)

domingo, 25 de octubre de 2015

Lectio divina. El Señor ha salvado a su pueblo


Así dice el Señor:
«Gritad de alegría por Jacob,
regocijaos por el mejor de los pueblos;
proclamad, alabad y decid:
El Señor ha salvado a su pueblo,
al resto de Israel.

Mirad que yo os traeré del país del norte,
os congregaré de los confines de la tierra.
Entre ellos hay ciegos y cojos,
preñadas y paridas:
una gran multitud retorna.

Se marcharon llorando,
los guiaré entre consuelos;
los llevaré a torrentes de agua,
por un camino llano en que no tropezarán.
Seré un padre para Israel,
Efraín será mi primogénito.»

Lectura del libro de Jeremías (31,7-9)

sábado, 24 de octubre de 2015

Himno de los Misioneros claretianos mártires

En la Memoria de San Antonio María Claret, haremos oración con el himno del Misionero que cantaron los mártires claretianos de Barbastro.



Jesús ya sabes, soy tu soldado siempre a tu lado yo he de luchar, contigo siempre y hasta que muera, una bandera y un ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Desde que mi alma, los lazos rotos, hizo sus votos ante tu altar, mi pecho siente sed infinita, mi frente agita gran ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
No me detengas en mi carrera, voy sin espera por Tí a luchar, que a nadie temo, nada me espanta pues me agiganta gran ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Si en mi camino hueste maldita ¡atrás! me grita ¡atrás, atrás! Si me disparan sangrientas balas, dárame alas el ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.

Con tus auxilios seré potente, David valiente contra Goliat. Saldré al combate y herida honda le haré con la honda de mi ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Si el enemigo sus fuerza agota y en mi derrota soñando está, sabré pararle su golpe rudo con el escudo de mi ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Pues ya lo sabes, soy tu soldado siempre a tu lado presto a luchar, contigo siempre y hasta que muera una bandera y un ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Quizá en el campo, rotas las venas, sin sangre apenas me veas ¡ay! Mira aún entonces sobre mi frente resplandeciente ese ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Acaso me oigas sólo y tendido dar un quejido, mi postrer ¡ay! Jesús, entonces habré vencido, y habré cumplido con mi ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí Rey mío, la sangre dar.
Virgen María, Reina del Cielo, Dulce Consuelo dígnate dar, cuando en la lucha tu fiel soldado caiga abrazado con su ideal.
¿Y qué ideal? Por Tí mi Reina, la sangre dar.

viernes, 23 de octubre de 2015

Lectio Divina. ¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte?


Sé muy bien que no es bueno eso que habita en mí, es decir, en mi carne;
porque el querer lo bueno lo tengo a mano, pero el hacerlo, no.
El bien que quiero hacer no lo hago;
el mal que no quiero hacer, eso es lo que hago.
Entonces, si hago precisamente lo que no quiero,
señal que no soy yo el que actúa, sino el pecado que habita en mí.

Cuando quiero hacer lo bueno,
me encuentro inevitablemente con lo malo en las manos.
En mi interior me complazco en la ley de Dios,
pero percibo en mi cuerpo un principio diferente
que guerrea contra la ley que aprueba mi razón,
y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mi cuerpo.

¡Desgraciado de mí!
¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte?
Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, y le doy gracias.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (7,18-25a)

jueves, 22 de octubre de 2015

Dios regala vida eterna por medio de Cristo Jesús, Señor nuestro.


Uso un lenguaje corriente,
adaptándome a vuestra debilidad,
propia de hombres;
quiero decir esto:
si antes cedisteis vuestros miembros
como esclavos a la inmoralidad y al desorden,
para el desorden total,
ponedlos ahora al servicio de la justicia
para vuestra santificación.

Cuando erais esclavos del pecado,
la justicia no os gobernaba.
¿Qué frutos dabais entonces?
Frutos de los que ahora os avergonzáis,
porque acaban en la muerte.

Ahora, en cambio, emancipados del pecado y hechos esclavos de Dios,
producís frutos que llevan a la santidad
y acaban en vida eterna.

Porque el pecado paga con muerte,
mientras que Dios regala vida eterna
por medio de Cristo Jesús, Señor nuestro.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (6,19-23)

miércoles, 21 de octubre de 2015

Que el pecado no siga dominando vuestro cuerpo mortal


Que el pecado no siga dominando vuestro cuerpo mortal,
ni seáis súbditos de los deseos del cuerpo.
No pongáis vuestros miembros al servicio del pecado,
como instrumentos para la injusticia;
ofreceos a Dios
como hombres que de la muerte han vuelto a la vida,
y poned a su servicio vuestros miembros,
como instrumentos para la justicia.

Porque el pecado no os dominará:
ya no estáis bajo la Ley, sino bajo la gracia.

Pues, ¿qué?
¿Pecaremos porque no estamos bajo la Ley, sino bajo la gracia?
¡De ningún modo!
¿No sabéis que, al ofreceros a alguno como esclavos para obedecerle,
os hacéis esclavos de aquel a quien obedecéis:
bien del pecado, para la muerte,
bien de la obediencia, para la justicia?

Pero, gracias a Dios,
vosotros, que erais esclavos del pecado,
habéis obedecido de corazón a aquel modelo de doctrina
al que fuisteis entregados
y, liberados del pecado,
os habéis hecho esclavos de la justicia.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (6,12-18)

martes, 20 de octubre de 2015

Por mi difunto tío Vicente Prieto



Os pido oraciones por mi tío Vicente Prieto, que ayer falleció a causa de un infarto. Fue mi padrino de bautismo. Que el Señor le conceda el perdón de sus pecados y el descanso eterno.

Dale, Señor, el descanso eterno.
Y brille para él la luz perpetua.
Descanse en paz.
Amén.

lunes, 19 de octubre de 2015

Liturgia Mozárabe. Oración Post Gloriam del Domingo 29


Acepta propicio nuestras oraciones,
tú que te sientas a la derecha de Dios Padre todopoderoso;
y puesto que tú eres nuestro único defensor,
intercede por nosotros desde el cielo al Padre bondadoso.
Amén.

domingo, 18 de octubre de 2015

Mi siervo justificará a muchos, porque cargó con los crímenes de ellos


El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento,
y entregar su vida como expiación:
verá su descendencia,
prolongará sus años,
lo que el Señor quiere prosperará por su mano.
Por los trabajos de su alma verá la luz,
el justo se saciará de conocimiento.
Mi siervo justificará a muchos,
porque cargó con los crímenes de ellos. 

Lectura del libro de Isaías (53,10-11)

martes, 13 de octubre de 2015

Visibilidad de Dios


Dios revela su reprobación de toda impiedad e injusticia de los hombres
que tienen la verdad prisionera de la injusticia.

Porque, lo que puede conocerse de Dios lo tienen a la vista;
Dios mismo se lo ha puesto delante.

Desde la creación del mundo,
sus perfecciones invisibles,
su poder eterno y su divinidad,
son visibles para la mente que penetra en sus obras.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (1,16-25)

lunes, 12 de octubre de 2015

Bendita y alabada sea la hora

En honor de la Santísima Virgen escuchamos el himno Bendita y alabada sea la hora, cantado por los Infanticos del Pilar.


Bendita y alabada sea la hora en que María Santísima vino en carne mortal a Zaragoza.
Por siempre sea, por siempre sea bendita y alabada.

domingo, 11 de octubre de 2015

Invoqué, y vino a mí el espíritu de sabiduría

Pedro Berruguete - Rey Salomón

Supliqué, y se me concedió la prudencia;
invoqué, y vino a mí el espíritu de sabiduría.
La preferí a cetros y tronos,
y, en su comparación, tuve en nada la riqueza.
No le equiparé la piedra más preciosa,
porque todo el oro, a su lado, es un poco de arena,
y, junto a ella, la plata vale lo que el barro.
La quise más que la salud y la belleza,
y me propuse tenerla por luz,
porque su resplandor no tiene ocaso.
Con ella me vinieron todos los bienes juntos,
en sus manos había riquezas incontables. 

Lectura del libro de la Sabiduría (7,7-11)

sábado, 10 de octubre de 2015

Yo, el Señor, habitaré en Sión.

Jan Provost - El último Juicio

El Señor ruge desde Sión,
desde Jerusalén levanta su voz;
tiemblan los cielos y la tierra.
Pero el Señor protege a su pueblo,
auxilia a los hijos de Israel.
Entonces sabrán que yo soy el Señor, su Dios,
que habito en Sión, mi monte santo.
Jerusalén será santa, y ya no pasarán por ella los extranjeros.
Aquel día los montes destilarán vino y de las colinas manará leche.
Los ríos de Judá irán llenos de agua
y brotará un manantial del templo del Señor
que regará el valle de las Acacias.
Egipto se volverá un desierto y Edom una árida llanura,
porque oprimieron a los hijos de Judá
y derramaron sangre inocente en su país.
En cambio, Judá estará habitada para siempre,
y Jerusalén por todos los siglos.
Vengaré su sangre,
no quedarán impunes los que la derramaron,
y yo, el Señor, habitaré en Sión.

Lectura del libro del profeta Joel (4,12-21)

viernes, 9 de octubre de 2015

Está cerca el día del Señor

Perugino - Tríptico Galitzin

Vestíos de luto y haced duelo, sacerdotes;
llorad, ministros del altar;
venid a dormir en esteras, ministros de Dios,
porque faltan en el templo del Señor ofrenda y libación.
Proclamad el ayuno,
congregad la asamblea,
reunid a los ancianos,
a todos los habitantes de la tierra,
en el templo del Señor, nuestro Dios,
y clamad al Señor.

¡Ay de este día!
Que está cerca el día del Señor,
vendrá como azote del Dios de las montañas.
Tocad la trompeta en Sión,
gritad en mi monte santo,
tiemblen los habitantes del país,
que viene, ya está cerca, el día del Señor.

Día de oscuridad y tinieblas,
día de nube y nubarrón;
como negrura extendida sobre los montes,
una horda numerosa y espesa;
como ella no la hubo jamás,
después de ella no se repetirá, por muchas generaciones.

Lectura de la profecía de Joel (1,13-15;2,1-2)

jueves, 8 de octubre de 2015

Por el Sínodo de los Obispos


Oremos por el Sínodo de los Obispos, reunidos en Roma en torno al papa Francisco, para tratar el tema de la familia y su importancia crucial en la vida cristiana.

Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad

miércoles, 7 de octubre de 2015

El Santo Rosario y la familia

Luca Giordano. Virgen del Rosario

La familia que reza unida, permanece unida. El Santo Rosario, por antigua tradición, es una oración que se presta particularmente para reunir a la familia. Contemplando a Jesús, cada uno de sus miembros recupera también la capacidad de volverse a mirar a los ojos, para comunicar, solidarizarse, perdonarse recíprocamente y comenzar de nuevo con un pacto de amor renovado por el Espíritu de Dios.

Muchos problemas de las familias contemporáneas, especialmente en las sociedades económicamente más desarrolladas, derivan de una creciente dificultad comunicarse. No se consigue estar juntos y a veces los raros momentos de reunión quedan absorbidos por las imágenes de un televisor. Volver a rezar el Rosario en familia significa introducir en la vida cotidiana otras imágenes muy distintas, las del misterio que salva: la imagen del Redentor, la imagen de su Madre santísima. La familia que reza unida el Rosario reproduce un poco el clima de la casa de Nazaret: Jesús está en el centro, se comparten con él alegrías y dolores, se ponen en sus manos las necesidades y proyectos, se obtienen de él la esperanza y la fuerza para el camino. 

San Juan Pablo II
Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae nº 41

martes, 6 de octubre de 2015

Por los monjes cartujos en el día de San Bruno


Oremos por los monjes cartujos, que celebran hoy la solemnidad de su Padre san Bruno. Han consagrado por completo su vida a la soledad y a la alabanza de la divina bondad. Pidamos al Señor que siga floreciendo su carisma en la Iglesia.

lunes, 5 de octubre de 2015

Acción de gracias


El año agrícola va llegando a su fin. Por eso, démos gracias al Señor, que nos sustenta con el alimento que de su bondad recibimos. No solemos acordarnos, en nuestra sociedad urbana, del abnegado trabajo de los agricultores y ganaderos, ni damos al gracias al Señor por su bondad y misericordia, que nos permite todos los años sustentarnos de los dones con los que enriquece la naturaleza.

A ti, oh Dios, te alabamos.
A ti, Señor, te bendecimos.
Te glorificamos y te damos gracias.

domingo, 4 de octubre de 2015

Por la familia religiosa franciscana

Francisco Ribalta - San Francisco confortado por un ángel músico

En este día en el que la Iglesia celebra llena de gozo la santidad de Francisco de Asís, oremos por la numerosa familia religiosa franciscana, que a lo largo de los siglos ha seguido las huellas del Poverello de Asís: los franciscanos, los capuchinos, las clarisas, las órdenes terceras, los mínimos, los ermitaños...., tantos y tantos religiosos que todavía hoy procuran vivir en pobreza y en amor a Dios. Que el Señor, por intercesión de san Francisco, les conceda la autenticidad evangélica de su carisma, y sigan siendo para el pueblo cristiano modelo de entrega al Reino de Dios.

sábado, 3 de octubre de 2015

Si un día os empeñasteis en alejaros de Dios, volveos a buscarlo con redoblado empeño


Ánimo, pueblo mío,
que llevas el nombre de Israel.
Os vendieron a los gentiles,
pero no para ser aniquilados;
por la cólera de Dios contra vosotros
os entregaron a vuestros enemigos,
porque irritasteis a vuestro Creador,
sacrificando a demonios y no a Dios;
os olvidasteis del Señor eterno que os había criado,
y afligisteis a Jerusalén que os sustentó.

Cuando ella vio que el castigo de Dios se avecinaba dijo:
«Escuchad, habitantes de Sión,
Dios me ha enviado una pena terrible:
vi cómo el Eterno desterraba a mis hijos e hijas;
yo los crié con alegría, los despedí con lágrimas de pena.
Que nadie se alegre viendo a esta viuda abandonada de todos.
Si estoy desierta, es por los pecados de mis hijos,
que se apartaron de la ley de Dios.
Ánimo, hijos, gritad a Dios,
que el que os castigó se acordará de vosotros.

Si un día os empeñasteis en alejaros de Dios,
volveos a buscarlo con redoblado empeño.
El que os mandó las desgracias
os mandará el gozo eterno de vuestra salvación.»

Lectura del libro de Baruc (4,5-12.27-29)

viernes, 2 de octubre de 2015

Por las Hermanas del Angel de la Guarda


Oremos por las Hermanas del Santo Ángel, a quienes he tenido el privilegio de conocer en la Misión Católica de Munich, que son verdaderos ángeles con tantas personas que encuentran en ellas una imagen convincente del amor evangélico. Oremos por las hermanas que se han dedicado a la enseñanza, y a las hermanas ancianas que han gastado su vida en el servicio a los demás. Para que el Señor las proteja, las bendiga, y las envíe sus santos ángeles.

jueves, 1 de octubre de 2015

Santa Teresa de Liseux. Homenaje a la Santísima Trinidad


Aquí estamos, Dios mío, postradas ante ti. Venimos a implorar la gracia de trabajar por tu gloria.

Las blasfemias de los pecadores resuenan dolorosamente en nuestros oídos. Y para consolarte y reparar las injurias que te hacen sufrir las almas redimidas por ti, ¡oh adorable Trinidad!, queremos formar un concierto con todos los pequeños sacrificios que vamos a hacer por tu amor. Durante quince días, te ofreceremos el canto de los pajarillos del cielo, que no cesan de alabarte y de reprochar a los hombres su ingratitud. Te ofrecemos también, Dios mío, la melodía de los instrumentos musicales, y esperamos que nuestra alma merezca ser una lira armoniosa que tú hagas vibrar para consolarte de la indiferencia de tantas almas que no piensan en ti. Queremos también, durante ocho días, atesorar diamantes y piedras preciosas que reparen el ansia de los pobres mortales por correr tras las riquezas pasajeras sin pensar en las eternas. ¡Dios mío!, concédenos la gracia de ser nosotras más diligentes en la búsqueda de los sacrificios, que las almas que no te aman en correr tras los bienes de la tierra.

Por último, durante ocho días, tus hijas recogerán el perfume de las flores, deseando reparar así las indelicadezas que te hacen sufrir las almas sacerdotales y religiosas. ¡Oh, bienaventurada Trinidad!, concédenos la gracia de ser fieles y la de poseerte cuando termine el destierro de esta vida… Amén.