martes, 23 de abril de 2019

Oración sacerdotal del Martes de Pascua. Liturgia Mozárabe


Acudamos todos, queridos hermanos,
todos los que estamos gozosos por haber sido librados de la muerte,
a celebrar el triunfo de Cristo después de su pasión.

Mirad cómo después de visitar los infiernos
vuelve de nuevo a su cuerpo
y lo hace inmortal por su resurrección.
En nada le ha dañado la violencia de la pasión a la que fue condenado;
pero nos ha perdonado todo a nosotros
la fuerza gloriosa de su resurrección.

Él no ha quedado perjudicado al aceptar la condición humana,
pero a nosotros nos ha elevado misericordiosamente
al entregarnos su divinidad.
Vivamos, pues, el gozo cristiano,
no quedemos sepultados entre placeres insustanciales.
Que en nuestra fiesta no haya nada poco decoroso.
El pueblo fiel debe salir del sepulcro de los vicios,
debe mostrarse blanqueado por la gracia a los ojos de los neófitos;
debe dar ejemplo de virtudes a sus niños.
Solo habrá una verdadera ofrenda pascual,
sin levadura de malicia,
si la devoción religiosa celebra su fiesta
en ázimos de sinceridad y de verdad.
R/. Amén.

domingo, 21 de abril de 2019

Prefacio de Pascua


En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
glorificarte siempre, Señor;
pero más que nunca en este día
en que Cristo, nuestra Pascua, ha sido inmolado.

Porque Él es el verdadero Cordero
que quitó el pecado del mundo:
muriendo destruyó nuestra muerte,
y resucitando restauró nuestra vida.

Por eso, con esta efusión del gozo pascual,
el mundo entero está llamado a la alegría
junto con los ángeles y los arcángeles
que cantan un himno a tu gloria, diciendo sin cesar:

Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del Universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.

sábado, 20 de abril de 2019

Por nuestros hermanos difuntos


Junto al Santo Sepulcro del Señor, oremos hoy por todos nuestros hermanos difuntos, que ya han compartido la muerte del Señor: para que Dios Padre, en su infinita misericordia, los haga participar de su gloriosa Resurrección, y les conceda gozar eternamente en el lugar del consuelo, de la luz y de la paz.

viernes, 19 de abril de 2019

Liturgia ortodoxa en la Adoración de la Santa Cruz


¡Alégrate! Cruz Portadora de la vida;
oh Paraí­so res­plandeciente de la Iglesia;
Tú que nos has brotado el madero de la incorruptibilidad
y el gozo de la gloria eterna.

Que por Ti,
las multitudes de los demonios serán expulsadas,
las Huestes Angelicales, al unísono se regoci­jan
y las asambleas de los fieles celebran.

¡Oh arma in­vencible y fortaleza inque­brantable,
victo­ria de los fieles y gloria de los sacerdote!;
concédenos llegar a la Pasión de Cristo
y a Su Re­surrección.

¡Alaben al Señor, todas las naciones,
glorifíquenlo, todos los pueblos!

¡Alégrate! Cruz portadora de la vida,
victoria invencible de la buena ala­banza,
puerta del Paraíso,
fir­meza de los fieles y júbilo de la Iglesia;
por la cual, la maldición desapareció y se desvaneció,
el poder de la Muerte fue aniquila­do
y  no­sotros fuimos elevados de la tie­rra a los Cielos.
Oh arma irresis­tible y combatiente de los demonios,
gloria de los mártires,
verdadero adorno de los piadosos
y puerto de la salvación
que otorga al mundo la gran misericordia.

jueves, 18 de abril de 2019

Oración del Jueves Santo

Dieric Bouts - La Última Cena

Dios nuestro, reunidos para celebrar la santísima Cena
en la que tu Hijo unigénito, antes de entregarse a la muerte,
confió a la Iglesia el nuevo y eterno sacrificio,
banquete pascual de su amor,
concédenos que, de tan sublime misterio,
brote para nosotros la plenitud del amor y de la vida.

Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.

miércoles, 17 de abril de 2019

El Señor me ayuda, por eso no sentía los ultrajes

Alonso Berruguete - Ecce Homo

Mi Señor me ha dado una lengua de iniciado,
para saber decir al abatido una palabra de aliento.
Cada mañana me espabila el oído,
para que escuche como los iniciados.
El Señor me abrió el oído;
yo no resistí ni me eché atrás:
ofrecí la espalda a los que me apaleaban,
las mejillas a los que mesaban mi barba;
no me tapé el rostro
ante ultrajes ni salivazos.

El Señor me ayuda,
por eso no sentía los ultrajes;
por eso endurecí el rostro como pedernal,
sabiendo que no quedaría defraudado.

Tengo cerca a mi defensor,
¿quién pleiteará contra mí?
Comparezcamos juntos.
¿Quién tiene algo contra mí?
Que se me acerque.

Mirad,
el Señor me ayuda,
¿quién me condenará?

Lectura del libro de Isaías (50,4-9a)

martes, 16 de abril de 2019

Te hago luz de las naciones


Escuchadme, islas;
atended, pueblos lejanos:
El Señor me llamó desde el vientre materno,
de las entrañas de mi madre,
y pronunció mi nombre.

Hizo de mi boca una espada afilada,
me escondió en la sombra de su mano;
me hizo flecha bruñida,
me guardó en su aljaba y me dijo:
- «Tú eres mi siervo, Israel,
por medio de ti me glorificaré».

Y yo pensaba:
«En vano me he cansado,
en viento y en nada he gastado mis fuerzas».

En realidad el Señor defendía mi causa,
mi recompensa la custodiaba Dios.
Y ahora dice el Señor,
el que me formó desde el vientre como siervo suyo,
para que le devolvise a Jacob,
para que le reuniera a Israel;
he sido glorificado a los ojos de Dios.
Y mi Dios era mi fuerza:
- «Es poco que seas mi siervo
para restablecer las tribus de Jacob
y traer de vuelta a los supervivientes de Israel.
Te hago luz de las naciones, 
para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra».

Lectura del libro de Isaías (49,1-6)

lunes, 15 de abril de 2019

Prefacio 1 de la Pasión del Señor


En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo,
Dios todopoderoso y eterno.

Por la Pasión salvadora de tu Hijo
la humanidad entera fue capaz de glorificarte,
porque en la fuerza inefable de la cruz
se manifestó el juicio del mundo
y el poder de Cristo crucificado.

Por eso, con todos los ángeles y santos,
cantamos sin cesar tus alabanzas:
Santo, Santo, Santo
es el Señor, dios del Universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.

domingo, 14 de abril de 2019

Oración en el Domingo de Ramos

Cristo en Majestad de Batló

Dios todopoderoso y eterno,
tú mostraste a los hombres
el ejemplo de humildad de nuestro Salvador,
que se encarnó y murió en la cruz;
concédenos recibir las enseñanzas de su Pasión,
para poder participar un día de su gloriosa resurrección.
Él que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo,
y es Dios, por los siglos de los siglos.
Amén.

viernes, 12 de abril de 2019

El Señor es mi fuerte defensor


Oía la acusación de la gente:

«“Pavor-en-torno”,
delatadlo, vamos a delatarlo».
Mis amigos acechaban mi traspié:
«A ver si, engañado, lo sometemos
y podemos vengarnos de él».

Pero el Señor es mi fuerte defensor:
me persiguen, pero tropiezan impotentes.
Acabarán avergonzados de su fracaso,
con sonrojo eterno que no se olvidará.

Señor del universo, que examinas al honrado
y sondeas las entrañas y el corazón,
¡que yo vea tu venganza sobre ellos,
pues te he encomendado mi causa!

Cantad al Señor, alabad al Señor,
que libera la vida del pobre
de las manos de gente perversa.

Lectura del libro de Jeremías (20,10-13)

jueves, 11 de abril de 2019

Santa Teresa de Jesús. Loas a la Cruz

 

Cruz, descanso sabroso de mi vida,
Vos seáis la bienvenida.

iOh bandera, en cuyo amparo
El más flaco será fuerte!
iOh, vida de nuestra muerte,
Que bien la has resucitado!
AI león has amansado,
Pues por ti perdió la vida.
Vos seáis la bienvenida.

Quien no os ama está cautivo
Y ajeno de libertad;
Quien a vos quiere allegar
No tendrá en nada desvío.
iOh dichoso poderío
Donde el mal no halla cabida!
Vos seáis la bienvenida.

Vos fuisteis la libertad
De nuestro gran cautiverio;
Por vos se reparó mi mal
Con tan costoso remedio,
Para con Dios fuiste medio
De alegría conseguida.
Vos seáis la bienvenida.

Santa Teresa de Jesús
Loas a la Cruz

miércoles, 10 de abril de 2019

Oración Post Gloria. Liturgia mozárabe de la Fiesta de la Invención de la Santa Cruz

Van Dyck. Crucifixión

Oh Cristo, Hijo de Dios,
haz que nos alegremos sobremanera en tu Cruz,
ya que por el misterio que en ella se consumó,
toda rodilla se dobla a tu nombre.
Concédenos que por tu victoria
atravesemos sin daño el mar de esta vida
y cuando llegue nuestro tránsito,
lleguemos hasta ti para ser coronados.
R/. Amén.

Por la misericordia del mismo Cristo, Dios nuestro,
que con el Padre y el Espíritu Santo,
un solo Dios
vive y reina por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

martes, 9 de abril de 2019

Oración ante Cristo crucificado


En esta tabla de tu Cruz divina
saldré de la tormenta del mar fiero
con el aliento del vivir postrero,
a donde el Norte de su luz me inclina.

   La nave de mi vida peregrina,
que en las Sirenas no temió primero,
en los bancos del mundo lisonjero
sin gobierno zozobra y desatina.

   Tú sola en tal peligro, tú me alientas,
tabla dichosa, que mi vida entabla
por tantas olas de mi error violentas.

   Cobréme en Ti, y a Ti llegue sin habla:
que no puedo anegarse en sus tormentas
quien se abrazare a tu divina tabla.

Lope de Vega
Rimas Sacras. Soneto XXV

sábado, 6 de abril de 2019

Yo, como manso cordero, era llevado al matadero.

Felipe Vigarny - Girola Catedral Burgos

EL Señor me instruyó, y comprendí,
me explicó todas sus intrigas.
Yo, como manso cordero,
era llevado al matadero;
desconocía los planes
que estaban urdiendo contra mí:
«Talemos el árbol en su lozanía,
arranquémoslo de la tierra de los vivos,
que jamás se pronuncie su nombre».

Señor del universo,
que juzgas rectamente,
que examinas las entrañas y el corazón,
deja que yo pueda ver
cómo te vengas de ellos,
pues a ti he confiado mi causa.

Lectura del libro de Jeremías (11,18-20)

Yo, como manso cordero, era llevado al matadero.

Felipe Vigarny - Girola Catedral Burgos

EL Señor me instruyó, y comprendí,
me explicó todas sus intrigas.
Yo, como manso cordero,
era llevado al matadero;
desconocía los planes
que estaban urdiendo contra mí:
«Talemos el árbol en su lozanía,
arranquémoslo de la tierra de los vivos,
que jamás se pronuncie su nombre».

Señor del universo,
que juzgas rectamente,
que examinas las entrañas y el corazón,
deja que yo pueda ver
cómo te vengas de ellos,
pues a ti he confiado mi causa.

Lectura del libro de Jeremías (11,18-20)

viernes, 5 de abril de 2019

Prefacio 5 de Cuaresma


En verdad es justo bendecir tu nombre,
Padre rico en misericordia,
ahora que, en nuestro itinerario hacia la luz pascual,
seguimos los pasos de Cristo,
maestro y modelo de la humanidad
reconciliada en el amor.

Tú abres a la Iglesia el camino de un nuevo éxodo
a través del desierto cuaresmal,
para que, llegados a la montaña santa,
con el corazón contrito y humillado,
reavivemos nuestra vocación de pueblo de la alianza,
convocado para bendecir tu nombre,
escuchar tu Palabra,
y experimentar con gozo tus maravillas.

Por estos signos de salvación,
unidos a los ángeles, ministros de tu gloria,
proclamamos el canto de tu alabanza:

Santo, Santo, Santo
es el Señor, Dios de Universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el Cielo

lunes, 1 de abril de 2019

Liturgia mozárabe- Oración entre los dípticos del Lunes IV de Cuaresma


A ti, Señor, Dios nuestro,
 pedimos de todo corazón
 que recibas nuestros ayunos como pingüe holocausto,
 perdones los pecados,
 nos inspires propósitos en que te deleites,
 gobiernes las acciones,
 corrijas los errores,
 limpies las conciencias,
 santifiques las almas
 sometiendo la carne al espíritu y el espíritu a ti.

Para que, humillada la carne y reconociendo su función,
 rechace los estímulos que se insinúan blandamente
 y el espíritu, vencedor sobre los vicios,
 ya recobrada la libertad,
 te sirva a ti, su Señor y Dios.
R/. Amén.