viernes, 27 de junio de 2014

Prefacio del Sagrado Corazón de Jesús


En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno,
por Cristo, Señor nuestro.

El cual, con amor admirable,
se entregó por nosotros,
y elevado sobre la cruz
hizo que de la herida de su costado
brotaran, con el agua y la sangre,
los sacramentos de la Iglesia:
para que así, acercándose al Corazón abierto del Salvador,
todos puedan beber con gozo de la fuente de la salvación.

Por eso, con los ángeles y arcángeles
y con todos los coros celestiales,
cantamos sin cesar el himno de tu gloria:

Santo, Santo, Santo
es el Señor,
Dios de universo.
Llenos están el cielo y la tierra
de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor
Hosanna en el cielo

No hay comentarios:

Publicar un comentario